Es un bálsamo refrescante para la cara y el cuerpo con una textura ligera y fundida. Compuesto por un 94 % de ingredientes de origen natural, este bálsamo calma e hidrata intensamente la piel después de la exposición al sol, al tiempo que mantiene el bronceado.
La textura fresca y agradable de este bálsamo después del sol reduce las sensaciones de incomodidad en la piel. Su fragancia monoi también aporta una sensación de frescura, complementando la experiencia sensorial.
La piel está hidratada y se siente calmada, a la vez que se realza con un brillo satinado.
